Si elegiste ser veterinaria y tener tu  propio negocio para tener más libertad y combinar tu pasión por los animales con tu otra pasión, tu familia...

¿Por qué tienes la sensación de que no llegas a todo y no eres capaz de desconectar?

¿Por qué sientes que le dedicas incluso el tiempo de tu familia?

¿Por qué sientes que al irte a casa con el teléfono tienes menos libertad que un preso?

Pero ahora mismo no sabes de que forma cambiar un ritmo que te tiene atrapada día tras día.

Te gustaría cambiar de rumbo y reiniciar, hacer las cosas diferentes pero piensas que a estas alturas es lo que hay.

Porque tú lo que quieres es...

aprender a organizarte mejor.

tiempo libre de verdad, sin ataduras.

una receta paso a paso para mejorar tu negocio

que tus clientes te quieran por lo que le ofreces y no por tus precios, paguen con una sonrisa y te recomienden a los vecinos.

Voy a contarte a lo largo de los diferentes mails lo que he hecho en mi negocio para conseguirlo, lo que me ha funcionado (y lo que no).

Lo que han aplicado ya algunos de mis clientes con excelentes resultados  para poder disfrutar más de su vida fuera de la clínica.

Porque la realidad es que tener una clínica no tiene por qué ser sinónimo de esclavitud.